La principal función del volante de inercia del motor es almacenar energía. Cuando el motor está en funcionamiento, el volante de inercia almacena energía e inercia para que el cigüeñal pueda seguir girando. Gracias a la gran inercia del volante, se reducen las fluctuaciones en la velocidad del motor y se aumenta la estabilidad del funcionamiento. Sin el efecto amortiguador del volante de inercia, la velocidad del motor fluctuaría significativamente y la potencia entregada sería incoherente. Esto convierte al volante de inercia en un componente indispensable en un motor monocilíndrico o multicilíndrico.